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Plan de formación guías Sitio de Memoria Estadio Víctor Jara | Amanda Jara y la lucha de la Fundación Víctor Jara: “Han habido muchas frustraciones pero también momentos lumínicos”

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La representante de la Fundación Víctor Jara comentó ante la clase del plan de formación de monitores/as de visitas guiadas en el Sitio de Memoria Estadio Víctor Jara su reflexión durante los más de 30 años de trabajo de la organización y cómo ha sido sobrellevar este largo proceso por exigir justicia ante el asesinato de su padre en dictadura.

El pasado 17 de mayo en una nueva jornada del plan de formación de monitores/as para visitas guiadas en el Sitio de Memoria Estadio Víctor Jara, Amanda Jara, quien es representante de la Fundación Víctor Jara, contó detalles de la labor de la organización desde su creación y además, relató su experiencia sobre el largo proceso de la búsqueda de justicia por el homicidio de su padre, el cantante Víctor Jara, detenido y asesinado en el ex Estadio Chile al inicio de la dictadura militar de 1973. 

La representante se sinceró y comentó que el enfrentar la muerte de su padre y el visitar el ex Estadio Chile ha sido un proceso difícil para ella: “Son 32 años, más de la mitad de mi vida desde el origen de la Fundación. En un principio no quería entrar al estadio, era oscuro, siniestro. Siempre estuve media en conflicto en esta pelea por este lugar, por eso digo que esto ha sido un aprendizaje”, aseguró.

Y es en este camino de aprendizaje que Amanda Jara mencionó que actualmente piensa que los lugares de terror deben ser marcados y es por ello que señaló que se ha acoplado en la batalla por defender el estadio: “A medida que uno envejece se da cuenta lo importante que es decir qué es lo que pasó, qué es lo que nos pasa, no debe ser barrido debajo de la alfombra. Eso lo logré entender después de mucho tiempo”, afirmó Amanda Jara.

“Canto Libre”, el puntapié para la creación de la Fundación Víctor Jara

De vuelta a la democracia y en un ambiente donde se evidenciaba la desarticulación cultural en la sociedad —de acuerdo a Amanda—, el 5 y 6 de abril de 1991 se realizó “Canto Libre: jornadas de purificación”, instancia en la que Joan Jara, Amanda Jara y Manuela Bunster convocaron a diversos artistas de todas las áreas de la cultura para abrir las puertas del ex Estadio Chile para liberarlo y darle un aire purificador de manera simbólica. Una actividad dirigida por el actor y director de teatro Andrés Pérez y el bailarín y coreógrafo Patricio Bunster.  

Amanda declaró que: “En 1991 se hizo el hito fundador que fue Canto Libre y nos dimos cuenta que hubo unas ansias del mundo cultural por hacer cosas cuando llegamos a limpiar este lugar. Ahí nos dimos cuenta que mi papá no sólo había sido una víctima emblemática —eso que dicen que es odioso para mí como hija—, sino que por su música, su conexión con el arte y la cultura, él era una especie de paraguas”. 

La representante de la Fundación Víctor Jara complementó que “Canto Libre fue un proceso de meses y desde ahí nos dimos cuenta que la fundación podía ser un vehículo para la resistencia cultural”.

Un largo camino de impunidad y utilización, pero con el apoyo popular vigente

De acuerdo a Jara, el hito de “Canto Libre” fue un acto de sanación y energía para ella y su familia. Sin embargo, al mismo instante comprendieron que si levantaban la fundación y continuaban trabajando por la exigencia de justicia y en pro de los derechos humanos debían hablar con las instituciones de poder y con representantes de la política, además de tener que recurrir a la utilización del nombre desde lo simbólico. 

En esa línea, afirmó que “hay una veta oscura, entre la impunidad y la utilización (del nombre, de la música, de lo simbólico), pero una debe seguir adelante con esa veta que están en los poderes de los medios, políticos, institucionales”. 

También sostuvo que aún no hay justicia contra muchas víctimas de la dictadura, entre ellas, su padre y Littré Quiroga, quienes fueron torturados y asesinados tras su detención en el ex Estadio Chile, por lo que “ha habido impunidad por parte de la justicia, pero también de quienes no han cumplido sus promesas de campaña política”, dijo Jara.

En la charla, Amanda reveló que durante el gobierno de Ricardo Lagos hubo conversaciones para disponer el ex Estadio Chile a la Fundación Víctor Jara y abrir un espacio cultural, pero no resultó, “fue una promesa de campaña frustrada”, de acuerdo a Jara, y que a partir de aquella negativa, de manera autogestionada, crearon el famoso “Galpón Víctor Jara” que por muchos años cobijó a diversos artistas a pasos de la Plaza Brasil en un ambiente sumamente comunitario.

Respecto al cierre del “Galpón Víctor Jara” dijo que en múltiples oportunidades fue clausurado porque “en este país, te piden que la cultura se industrialice, pero nosotros con el galpón no queríamos hacer eso, y en ese sentido, quizás fuimos muy románticos, pero hubo mucha presión para su clausuración y es que el arte de Víctor es contestatario, crea conciencia, no es parte del arte oficial, y eso no gusta”, manifestó la hija del cantautor. 

Por otra parte, mencionó que en todos los esfuerzos que ha hecho la Fundación han estado acompañados por la sociedad civil y que siempre han querido conservar la identidad de Víctor:

“Hemos intentado mantener limpio a mi papi, no desvestirlo de toda su humanidad, sino que presentarlo tal cual era, inclusive su militancia en el PC, pero el trabajo que ha hecho la Fundación siempre ha estado aparte de los partidos políticos, pero yo creo que esa impronta que le dio mi mamá ha sido fundamental en el trabajo con las organizaciones, en los barrios, en la plazas, con la gente común”, reflexionó Amanda. 

Para Amanda en la lucha incesante que ha tenido la Fundación Víctor Jara “han habido muchas frustraciones pero también momentos lumínicos”, porque la organización siempre ha tenido el cariño de la gente, el apoyo popular en las campañas que ha levantado la Fundación como el cambio de nombre del ex Estadio Chile. En ese aspecto, Amanda confesó que su madre, Joan Jara, dice que “no ha habido justicia pero el pueblo sí la ha hecho”.

Finalmente, la representante de la Fundación aseveró que “como sociedad tenemos la oportunidad de transformar desde el trabajo colectivo, lo que ayuda a que uno siga teniendo la energía para seguir exigiendo justicia. Hay que disputar los espacios tal y como uno disputa la memoria…Espero no llegar a los 95 años y que todavía no haya justicia ni el Estadio Víctor Jara esté botado”, sentenció.

*El plan de formación de monitores/as para visitas guiadas en el Sitio de Memoria Víctor Jara es apoyado por el Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio.

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