El jueves 11 de abril la Unidad de Cultura, Memoria y Derechos Humanos (UCMDDHH), dependiente de la Subsecretaría de las Culturas y las Artes realizó una cuenta pública de sus acciones en la Fundación Víctor Jara. Una jornada donde a través del diálogo se discutieron las futuras proyecciones de la Unidad en conjunto con representantes de organizaciones de derechos humanos de la Región Metropolitana.
El encuentro contó con la presencia de la Seremi de las Culturas, las Artes y el Patrimonio de la Región Metropolitana, Ana Mora Peña, quien manifestó su agradecimiento a la labor de la Unidad de Memoria y DDHH: “Cuando en nuestro país y en el mundo nos enfrentamos a un discurso que muchas veces relativiza la importancia vital de los DDHH, arriesgándonos a un retroceso civilizatorio, debemos cuidar cada centímetro avanzado y el trabajo que aquí se realiza. En este sentido, me preocupa la escalada de vandalización que han sufrido distintos sitios de memoria en la RM y en el país. Vamos a buscar formas de enfrentar y contener estos hechos en conjunto”, expresó.
Amanda Jara junto a Francia Jamett
Por su parte, la presidenta de la Fundación Víctor Jara, Amanda Jara, agradeció a Francia Jamett, representante de la UCMDDHH, por hacer parte de la discusión a las organizaciones de derechos humanos: “Nosotros somos personas que han estado la vida entera luchando por que el Estado se dé cuenta que estos temas son transversales a toda nuestra formación como sociedad”.
Respecto a las reciente vandalizaciones de sitios de memoria y la sepultura de su padre y madre, Víctor y Joan Jara, aseguró que: “No podemos dejarnos estar, tenemos que seguir a pesar de nuestras frustraciones y nuestras tristezas y empujar para que esta institucionalidad nos acoja, y nos escuche porque sí tenemos experiencia en esto”, puntualizó Amanda Jara.
Sub Puntos abordados
En la jornada se presentó el informe del III Encuentro Nacional de Sitios y Lugares de Memoria desarrollado del 28 al 30 de noviembre 2023 en el Sitio de Memoria Estadio Víctor Jara. Entre las impresiones registradas en una encuesta aplicada a quienes asistieron, se reconoce un evidente sentimiento de agradecimiento y aprecio por la realización del encuentro y conformidad con las reflexiones y propuestas que buscan contribuir a una gestión integral de los Sitios de Memoria. Ello, concuerda con el propósito de la actividad en cuanto a visibilizar diversas producciones culturales generadas por agrupaciones de Derechos Humanos vinculadas a Sitios de Memoria.
La jornada continuó con la presentación del Informe de agravios a lugares y sitios de Memoria en la que se dio a conocer que, desde 2018 a la fecha, se han registrado 142 ataques, distribuidos entre 67 sitios o lugares de memoria del país. El documento proporciona información detallada sobre los ataques ocurridos con el objetivo de difundir y sensibilizar acerca de estos agravios, para que las autoridades puedan dar cumplimiento a Ley de Monumentos Nacionales, así como al principio de la memoria histórica establecido en la Ley 21.045 que creó el Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio.
Las personas asistentes también pudieron conocer el protocolo programático para 2024 de la Unidad de Cultura, Memoria y Derechos Humanos, la que acciona desde el Departamento Ciudadanía Cultural.
Más de 50 personas participaron del encuentro literario en torno al libro “Víctor, un canto inconcluso” escrito por Joan Jara.
El pasado jueves 18 de abril la presidenta de la Fundación Víctor Jara, Amanda Jara, participó de un conversatorio por el mes del libro organizado por el Departamento de Cultura de la Municipalidad de Renca. Un encuentro literario que convocó en la Casa de la Cultura a más de 50 personas, en su mayoría, estudiantes de enseñanza media de establecimientos de la comuna que dialogaron en torno al libro “Víctor, un canto inconcluso” escrito por Joan Jara.
La actividad fue iniciada con la presentación de danza contemporánea de Javier Zapata, profesor de danza de la Escuela Comunitaria de las Artes, en memoria de Joan Jara, quien fuera bailarina, profesora y fundadora -junto a Patricio Bunster- del Centro de Danza Espiral.
Amanda Jara mantuvo una conversación sobre la vida de su madre y padre, Joan y Víctor Jara, revelando recuerdos de su infancia y reflexionando sobre el asesinato contra su padre y las violaciones a los derechos humanos que ejecutó la dictadura militar de Augusto Pinochet. También compartió su visión sobre las culturas y las artes en Chile, analizando las políticas actuales en esta materia.
“La cultura es participación, creación, colaboración y tendemos hoy en día a funcionar individualmente. Sin embargo, hay una inquietud de la sociedad de participar en cultura pero eso se debe canalizar en políticas públicas. El arte es una herramienta de transformación social. Los cantantes jóvenes denuncian, tienen una preocupación por lo que pasa alrededor”, comentó Amanda Jara.
Así también, la presidenta de la Fundación Víctor Jara lamentó los pocos recursos que hay en artes y cultura y cuestionó las dinámicas de los fondos concursables: “Es mucho más difícil acceder a la cultura de forma democrática. Hemos caído en una forma de hacer cultura que es competitiva, que es concursable. La dinámica de los fondos del Estado hace que las organizaciones artísticas y culturales se peleen entre ellos para obtener ese fondo y montar la obra”.
En medio de su visita por Chile, el músico español visitó la Fundación Víctor Jara para conversar con Amanda Jara y conocer el legado del cantautor asesinado en dictadura.
A mediados de abril, Juan Gómez Canca, artísticamente conocido como “El Kanka” vino a Chile para presentarse con sus shows musicales en distintos recintos del país. Sin embargo, en medio de este viaje no quiso perder la oportunidad de visitar la Fundación Víctor Jara para conocer detalladamente el legado de Víctor Jara, cantautor asesinado por militares al inicio de la dictadura en Chile.
En su visita a la Fundación, El Kanka recorrió la exposición “Víctor Jara. Dos miradas. 50 años” que contiene fotografías del autor de “El derecho de vivir en paz” y de su vigente legado por el mundo. Imágenes tomadas por Antonio Larrea y Luis Poirot, dos fotógrafos de gran trayectoria y esenciales de la fotografía nacional.
El Kanka visita la exposición “Víctor Jara. Dos miradas. 50 años” en la Fundación Víctor Jara
En su recorrido fue acompañado por Javier Osorio y Jorge Leiva, ambos integrantes del Archivo Víctor Jara, quienes le profundizaron los detalles tras la exposición fotográfica. Así también, Amanda Jara, presidenta de la Fundación Víctor Jara conversó con el artista malagueño sobre la obra de su madre y padre, Joan y Víctor Jara.
Sobre su interés por visitar a la Fundación, El Kanka aseguró que: “A Víctor Jara lo escucho desde pequeño, mi padre me cantaba sus canciones desde que estaba en la cuna, así que siempre ha estado en mi inconsciente”.
Amanda Jara y El Kanka
También analizó la escena musical chilena, comentando que: “Chile es un país muy particular. Creo que tienen mucho amor por la música y amor por la canción social. Me parece que no hay otro país que se le compare.Tiene una historia muy concreta y sus canciones siempre tienen un mensaje muy potente, de revolución y de cambio”, concluyó el Kanka.
En el año 2023 se cumplieron cincuenta años del recital que Víctor Jara ofreció en Arequipa, como parte de su gira de casi tres semanas por Perú. Para conmemorar esa visita, el realizador peruano Erick Tejada estrenó el minidocumental Te recuerdo Víctor: las huellas de Víctor Jara en el Perú, donde reconstruye con archivos y entrevistas parte de esa visita. Algunos de esos episodios los relata en esta rigurosa crónica.
Un vuelo de la extinta aerolínea estatal Satco llevó a Víctor Jara desde el Cusco hasta Arequipa, hacia el mediodía del lunes 9 de julio de 1973. Sería esa una estación previa a su retorno a Lima y al cierre en la capital de su auspiciosa gira por el Perú.
Tras su arribo, anunciado en los medios desde varios días atrás, ofreció una conferencia de prensa en el antiguo Hotel Presidente. Víctor habló allí de su obra:“Las aspiraciones y esperanzas de nuestros pueblos”, dijo, “son las fuentes que nutren la nueva canción latinoamericana”. Como en otras ocasiones, también destacó el rol fundador dentro de esa vertiente de su compatriota, la gran Violeta Parra. La nota periodística publicada al día siguiente en el diario local El Pueblo, está acompañada de la que podría ser la única fotografía que se conserva de Víctor Jara en Arequipa. En ella el cantautor aparece hablando de forma distendida, respondiendo probablemente alguna pregunta de sus interlocutores.
Su recital estuvo anunciado para las siete de la noche del martes 10 de julio. Como en las demás ciudades peruanas, fue organizado por la filial departamental del entonces Instituto Nacional de Cultura (INC) –hoy, Ministerio de Cultura- y patrocinado por el Concejo Provincial de Arequipa, que concedió el uso del teatro que hace parte del complejo cultural municipal Ateneo, ubicado en la esquina de las calles Tristán y Álvarez Thomas en el centro histórico.
Las entradas pueden estimarse entre 30 y 15 soles de la época, según fueran las butacas en platea o galería. La obra musical de Víctor Jara se difundía en algunas radios locales y en los discos que circulaban de mano en mano, por lo que su presencia concitó expectativa entre sus admiradores.
El repertorio del artista durante esa jornada, al igual que su vestimenta, fueron muy similares a los de su presentación en Panamericana Televisión, en Lima, que fue grabada exactamente una semana después de su concierto en Arequipa. Incluyó “El derecho de vivir en paz”, “Te recuerdo Amanda”, “Luchín”, “Preguntas por Puerto Montt, “Las casitas del barrio alto” y “Ni chicha ni limonada”, entre varias otras.
Los testimonios de quienes estuvieron aquella noche en el Ateneo indican que el recinto estuvo abarrotado, sobre todo de jóvenescolegiales, universitarios y trabajadores, y que de hecho muchos de ellos ni pudieron ingresar porque las entradas se agotaron.
En el ideologizado ambiente de aquellos años, algunos asistentes recuerdan que un militante de una de las organizaciones juveniles de izquierda se dirigió al trovador desde la galería, a viva voz y a mitad del concierto, requiriéndole una opinión categórica sobre el proceso político que se vivía en el Perú. Víctor habría evadido amable y prudentemente la espinoza cuestión, habida cuenta de los encontrados apasionamientos que ya había advertido dentro de la balcanizada, y a veces delirante izquierda peruana, que se debatía entre estar a favor y en contra del gobierno nacionalista del General Juan Velasco Alvarado.
A lo que sí parece haber accedido el artista al final de su concierto es a cantar, a pedido de un sector entusiasta de su público, “La zamba del Che”. La canción, compuesta por el mexicano Rubén Ortiz en 1967 y popularizada por Víctor, parecía sintonizar con los ímpetus más recalcitrantemente “antimilitaristas” de una parte del auditorio.
Según el recuerdo de Gilberto Aguilar, quien estuvo presente en la sala, el trovador chileno puso un pie de página a su interpretación, llamando a diferenciar a los militares progresistas como el General Velasco, de aquellos otros que en el continente sostenían regímenes antipopulares y represivos.
Ese feliz encuentro con un público tan inquieto como acogedor, tendría como remate una secuela gastronómica en un puesto callejero de anticuchos, próximo al teatro. A la cabeza de quienes lo condujeron hasta esa gratificante faena se encontraba el recordado poeta José Ruiz Rosas, que como funcionario del INC hizo las veces de anfitrión de Víctor en la ciudad. El día terminaría con una cena en petit comité ofrecida en su residenciapor el Cónsul de Chile en Arequipa.
Algo más sobre la gira de Víctor Jara por el Perú
En un artículo publicado a poco de volver a Chile, en la revista La quinta rueda, Víctor Jara cifró en casi veinte los recitales que dio en el Perú, valorando de forma especial que los teatros municipales se hubieran abierto para recibirlo, ya que el acceso a este tipo de escenarios le había resultado infrecuente.
En la prensa peruana han quedado huellas de algunas de sus actuaciones como parte de la gira de 1973. Son, en orden cronológico, las que siguen:
Lima, sábado 30 de junio, en las oficinas de redacción de los diarios Expreso y Extra.
Lima, sábado 30 de junio, en el Teatro Municipal.
Lima, domingo 1 de julio, en la concha acústica del Campo de Marte.
Chiclayo, martes 3 de julio, en el Teatrín de la ciudad.
Trujillo, miércoles 4 de julio, en el Teatro Municipal.
Trujillo, miércoles 4 o jueves 5 de julio, en la Cooperativa Laredo.
Cusco, sábado 7 de julio, en el Centro Qosqo de Arte Nativo.
Arequipa, martes 10 de julio, en el Teatro Ateneo.
Lima, viernes 13 de julio, en el local de la Federación Gráfica.
Lima, sábado 14 de julio, por segunda vez en el Campo de Marte.
Su actuación en la Federación Gráfica tuvo lugar durante un “Acto de Solidaridad con el pueblo de Chile”, organizado por la Confederación General de Trabajadores del Perú
(CGTP), en el que compartió escenario con la célebre y joven cantante peruana Tania Libertad. Además, Víctor realizó su ya histórica presentación en los estudios de Panamericana Televisión de Lima, el martes 17 de julio.
Pero hubo más presentaciones. En una nota póstuma, de septiembre de 1973 en el diario Expreso, se señala que Víctor se presentó en varios pueblos jóvenes –léase urbanizaciones populares- de Lima, aunque sin mayores precisiones de lugares y fechas. Y, según relata el músico y escritor Jinre Guevara, actuó también en la Sociedad de Autores y Compositores Populares (SAYCOPE) ubicada en el distrito del Rímac.
De entre los testimonios visuales que pudimos redescubrir en los archivos, me resultan particularmenteconmovedores los de las actuaciones de Víctor Jara para los trabajadores cooperativistas de la Cooperativa Laredo en Trujillo, y para los trabajadores de los diarios Expreso y Extra en Lima. “Soy un trabajador de la música”, había dicho más de una vez. También destaco el anuncio impreso de su presentación en el Campo de Marte, con su rostro estilizado de abundante sonrisa y sólida cabellera.Y por supuesto la hasta ahora única instantánea, coloquial y risueña, de su paso por Arequipa
Al igual que las icónicas fotografías tomadas a Víctor Jara en el Cusco por Marino Sánchez Macedo, existe un registro fotográfico de su viajea Trujillo, realizado por el maestro Víctor Phumpiú, aunque de momento solo se ha difundido alguno de los retratos, es posible que se trate de una colección ineludible para completar el perdurable rastro que dejó Víctor a su paso por el Perú. Ojalá podamos conocerla pronto.
Texto: Erick Tejada Sánchez
Víctor Jara en Arequipa. Fotografía publicada en el diario El Pueblo el 10 de julio de 1973.Víctor Jara en Laredo, Trujillo. Fotografía publicada en el diario La Industria el 7 de julio de 1973
Amanda Jara participó junto al alcalde Daniel Jadue y la narradora oral, Johanna Menares de un conversatorio en torno al libro “Víctor, un canto inconcluso” de Joan Jara, declarando que “Leer este libro es entender a mi papá”.
En el contexto del Mes de la Mujer, el pasado jueves 21 de marzo la Corporación Cultural de Recoleta con la colaboración de la Fundación Víctor Jara organizaron un conversatorio en torno al libro “Víctor, un canto inconcluso” escrito por Joan Jara. Una cita que contó previamente con la presentación de la Compañía Danza en Cruz, con una coreografía de la destacada bailarina nacional Valentina Pavez Pizarro, quien fuera compañera de ruta de Joan Jara en la reconocida Compañía Danza Espiral.
La ceremonia contó con la participación del alcalde Daniel Jadue, la presidenta de la Fundación Víctor Jara, Amanda Jara, Johanna Menares, narradora oral oriunda de Recoleta, además de las concejalas Karen Garrido, Joceline Parra y Silvana Flores, los concejales Fares Jadue, Cristián Weibel y José Luis Salas, y el cantautor Francisco Villa.
En medio del diálogo, Amanda Jara reveló detalles del proceso creativo de su madre, Joan Jara, en la escritura de “Víctor, un canto inconcluso”, mencionando que fue una amiga de su madre quien le sugirió escribir un libro para contar y denunciar el asesinato contra Víctor, de las violaciones a los derechos humanos que estaba ejecutando la dictadura en aquella época.
“Mi mamá entendía que tenía que hacer mucha investigación porque Víctor era parte de un todo, de un movimiento político-cultural gigantesco que se dio en este país y que cultivó las almas de este pueblo. Mi mamá estuvo en dictadura, de manera clandestina investigando para escribir este libro que está hecho con una generosidad muy auténtica. Ella visitó diversos lugares como parte de su investigación, recorriendo sectores en los que estuvo mi papá”, sostuvo Amanda Jara.
Por otra parte, la presidenta de la Fundación Víctor Jara declaró que: “Estar junto con los vecinos y vecinas de todos los barrios es algo que motiva. El legado de mi papá y mamá hay que comprenderlos como persona, no como personajes. Mi papá era un hombre que amaba, luchaba, trabajaba, jugaba, un padre, un esposo, un compañero… Leer este libro es entender y conocer a Víctor”.
Jara también valoró este punto de encuentro de conversación con la comunidad de Recoleta: “Yo creo que estas instancias son actos que empujan hacia tener una visión compartida en la cultura. El trabajo que hace Recoleta en cultura es bien bonito, interesante y nosotros como Fundación estamos felices de estar aliados”.
La ceremonia finalizó con la entrega ejemplares de “Víctor, un canto inconcluso” a vecinas y dirigentas de Recoleta, acompañada de la interpretación musical, Francisco Villa, trovador y director de las voces del homenaje “Mil Guitarras y Mil Voces para Victor Jara”.
Con una exposición de la Fundación Víctor Jara, un conversatorio en torno al libro escrito por Joan Jara y una escultura en homenaje a la memoria del cantautor asesinado en dictadura, el Municipio y la comunidad de Pudahuel recuerdan el legado de Víctor Jara.
El miércoles 20 de marzo tres hitos marcaron la agenda cultural del Municipio de Pudahuel con la colaboración de la Fundación Víctor Jara. El primero de ellos tuvo inicio en el Centro Cultural Anita González (Av. Laguna Sur #8708) con la inauguración de la exposición fotográfica “Víctor Jara: El mundo gira y crea porque existe el amor” que recoge frases y fotografías del cantautor asesinado tras el Golpe de Estado de 1973.
En la instancia, Amanda Jara, presidenta de la Fundación Víctor Jara, agradeció la oportunidad de llevar la exposición a las y los vecinos de la comuna, sosteniendo que: “Estos actos son los que como Fundación nos dan las fuerzas para seguir adelante para entregar este legado de mi papá que va más allá de la música”.
Amanda Jara junto a vecinos y vecinas de Pudahuel
Agregando que, “en la exposición se lee un tema de conciencia de clase, conciencia política y por sobre todas las cosas, arte con generosidad, con mucho corazón, con valores reales que no tienen que ver con el lucro y la fama. Gracias por la oportunidad y esperemos que sean muchas más”, aseguró Amanda Jara.
Por su parte, el director de Dideco de Pudahuel, Felipe Morales, reflexionó en torno al legado y la filosofía de Víctor Jara:
“Cuando retomamos el legado de Víctor Jara, de sus obras teatrales, artísticas y musicales, es lo que queremos reivindicar también como comuna, y eso es el valor del trabajo, de la familia, de la creación, de la revolución, y en ese sentido inaugurar esta obra a través de la frase El mundo gira y crea porque existe el amor es el mensaje fundamental que tenemos que compartir con nuestras niñas, niños, vecinos y vecinas porque es el valor principal de la comunidad y es lo que podemos legar. Es una apertura para la memoria, para la acción del trabajo en colectivo que todos nosotros y nosotras merecemos”, complementó Felipe Morales.
Parte de la exposición “Víctor Jara: El mundo gira y crea porque existe el amor”
A su vez, Mariela Llancaqueo, coordinadora del Sitio de Memoria Estadio Víctor Jara, realizó un recorrido guiado de la muestra para las vecinas y vecinos presentes en la actividad.
La exposición “Víctor Jara: El mundo gira y crea porque existe el amor” estará disponible hasta el 30 de abril en el Centro Cultural Anita González de manera gratuita. Pero también irá itinerando en escuelas de Pudahuel. Más detalles en la cuenta de Instagram de Pudahuel Cultura.
La memoria de Víctor Jara para la comunidad de Pudahuel
El segundo se desarrolló en la Plaza Víctor Jara Sur, un conversatorio donde Amanda Jara conversó sobre el libro “Víctor, un canto inconcluso” escrito por Joan Jara, respondiendo también preguntas de las vecinas y vecinos, en torno a la labor social, artística y cultura tanto de su madre como de su padre. Así como también la consulta de una vecina sobre cómo abrir espacios culturales desde la autogestión.
“Nos tenemos que conocer entre los vecinos y vecinas. Hablarnos, porque estamos súper distanciados y distanciadas. Hay que recuperar lo colectivo. Espero que los vecinos y vecinas ocupen el Centro Cultural Anita González, eso es de ustedes, para compartir en familia y en comunidad. La comunicación es lo básico para construir, aprender y convivir con la memoria”, respondió Amanda Jara.
El último hito fue la inauguración de una escultura en homenaje a la memoria de Víctor Jara creada por el artista Heri Tapia en la plaza que lleva el nombre del cantautor. El alcalde de Pudahuel, Italo Bravo, agradeció la presencia de Amanda Jara y de las vecinas y los vecinos, afirmando que: “Como Municipio nuestro compromiso es levantar y apoyar el tejido y la organización social. Tal y como dice la canción La Pala de Víctor Jara, seguiremos abriendo los caminos que hemos iniciado en esta comuna, vamos a seguir abriendo camino con la alegría y fuerza que nos caracteriza”.
Queremos celebrar el espacio escultórico creado por el artista Óscar Plandiura, que forma parte del Parque Intercomunal Víctor Jara, cuyo proyecto atraviesa cuatro comunas de la Región Metropolitana.
En esta creación artística Óscar ha enfrentado un largo proceso con valentía y determinación. Sorteando recortes presupuestarios y aprehensiones políticas de las autoridades cuyas instituciones están a cargo de su realización.
A seis años de iniciado este proceso, logra sacar adelante el diseño original: una obra cuyo eje no es solo la figuración de Víctor Jara, sino un homenaje a su constante fuente de inspiración, el pueblo chileno. Ahí están los y las estudiantes y el infaltable quiltro, quienes iniciaron la Revuelta Popular más importante de los últimos 30 años.
Después de varias inauguraciones de diferente tipo para este Proyecto, y en vísperas de la última programada para el sábado 16 de marzo del año en curso, hacemos un llamado a las instituciones responsables a saldar la deuda que aún mantienen con el escultor, a no reducir el presupuesto asignado al parque y a acelerar las obras pendientes.
Esta iniciativa es una oportunidad que busca darle igualdad de acceso y disfrute de áreas verdes a los y las pobladoras del sector centro sur de la capital. Es un espacio público que se abre como posibilidad de equidad y justicia social para quienes habitan comunas históricamente segregadas y discriminadas.
Mantener y salvaguardar la importancia social y cultural de su realización ha sido para nosotros un compromiso, y también una alegría esperanzadora que llevara el nombre de otro poblador como Víctor Jara.
En 1979, Joan Jara acompañó una gira de Quilapayún por Estados Unidos, como parte de la intensa campaña de solidaridad internacional en favor de la resistencia chilena que se desarrolló en todo el mundo. Cuando pasaron por Minnesota, el 27 de febrero de 1979, Joan compartió escenario con la actriz y cantante folk Holly Near, un nombre esencial del activismo político y el movimiento feminista norteamericano de los años setenta. Este es el Documento del Mes de marzo de 2025 del Archivo Victor Jara.
El encuentro reunió a casi cien mujeres que se desenvuelven en diversas materias para reflexionar, buscar un punto de encuentro y colaborar entre sí desde la perspectiva del respeto de los DDHH.
El pasado 7 de marzo el Instituto Nacional de Derechos Humanos conmemoró el Día Internacional de la Mujer con la ceremonia “Encuentro de Mujeres que Inciden”. El acto contó con alrededor de un centenar de invitadas, entre ellas, la presidenta de la Fundación Víctor Jara, Amanda Jara.
En la actividad, el INDH entregó un reconocimiento a cuatro líderes destacadas, valorando su contribución en diversos ámbitos. Se reconoció a Rosa Devés, primera rectora de la Universidad de Chile cuyas investigaciones en fisiología celular son reconocidas a nivel internacional. También, a Devanna de la Puente, asesora de género de la misión ONU en Colombia, que defiende los derechos de mujeres y niñas en zonas de conflicto.
Además, recibieron el reconocimiento Susana Collante, que es presidenta de la Agrupación Lideresas Sociales de Maipú y cuyo trabajo busca potenciar el rol de las dirigentes sociales en sus territorios. Y finalmente Iona Rothfeld, futbolista profesional y presidenta y socia fundadora de la Anjuff.
Una once para compartir ideas
En la cita organizada por la consejera Constanza Valdés, presidenta de la comisión de Género del Consejo y la directora del INDH, Consuelo Contreras, se buscó reunir a mujeres que trabajan en las ciencias, la cultura, la academia, el deporte, la economía, la innovación y el trabajo en la sociedad civil. Con la finalidad de abrir un espacio para reflexionar y vincular prácticas, buscando un punto de encuentro a pesar de las distintas materias en las que se desenvuelven las invitadas.
Para Amanda Jara, este encuentro fue: “Un abrazo energizante entre muchas mujeres trabajadoras que compartimos experiencias, contactos, dándonos esperanza y una enorme ilusión para colaborar, trabajar juntas y participar de las actividades mutuas. Así que en tiempos que son un poco agobiantes, fue un abrazo de energía este encuentro organizado por el INDH”.
Durante la actividad las invitadas pudieron compartir una once, a través de la cual tuvieron oportunidad de profundizar en las actividades que realizan cada una de ellas. Una actividad realizada con un enfoque de respeto a los DD.HH. y la eliminación de cualquier discriminación.
Ante la noticia publicada por el medio digital INTERFERENCIA referente a Tomás Barrera, quien integraba nuestro equipo de trabajo, como Fundación Víctor Jara manifestamos lo siguiente:
– La defensa y promoción de los derechos humanos, así como la denuncia sobre las violaciones a los derechos humanos perpetradas por la dictadura y los gobiernos post-dictatoriales, son tareas esenciales que requieren el compromiso constante de la sociedad en su conjunto y ha sido un pilar fundamental para nuestro trabajo durante todos estos años. Consideramos que las luchas por la verdad, la justicia y la memoria son luchas que involucran a las familias afectadas y a todas aquellas personas que se sientan comprometidas por construir una sociedad justa y democrática. Por ello nuestra Fundación no exige requisitos más que la experiencia laboral, competencias profesionales, y el compromiso ético con la verdad, la justicia, la memoria motor que nos moviliza como organizaciones de derechos humanos.
Nos sentimos fuertemente conmocionados por lo ocurrido, puesto que vulnera la memoria de un detenido desaparecido, repercutiendo en un aprovechamiento político que ostentan aquellas personas que constantemente niegan y relativizan los crímenes de lesa humanidad. Por todo lo anterior hemos tomado la decisión de desvincular a Tomás Barrera de nuestro equipo de trabajo.